El envejecimiento cutáneo se caracteriza por la pérdida de elasticidad de la piel, cambios en su textura (adelgazamiento o engrosamiento) y en la aparición de irregularidades en la superficie de la misma (como pequeñas varices o manchas oscuras). También se puede diferenciar el envejecimiento intrínseco, provocado por un grupo de factores que aceleran el envejecimiento natural, como el tabaco, la falta de hormonas o la exposición al sol.
Sobre el envejecimiento cutáneo
Conforme pasan los años, la piel sufre algunos cambios inevitables que, todos juntos, estimulan la pérdida de elasticidad, flexibilidad y luminosidad de la piel, incluso puede perder algo de color en determinadas zonas.
Dependiendo de la capa de la piel, el envejecimiento afecta de diferente forma:
En la dermis, el envejecimiento provoca una falta de hidratación en la piel; el degradado de la fibra de colágeno y la elastina; la reducción de la síntesis del colágeno.
Por su parte, la epidermis sufre una acumulación de radicales libre y toxinas varias, la capa adelgaza, la melanina pasa a ser algo irregular, la microcirculación de la sangre es más pausada, etc.
¿Cuáles son las causas primordiales del envejecimiento prematuro de la piel?
Los contratiempos asociados con el envejecimiento cutáneo pueden reflejarse de distintas formas. No solo a nivel estético, sino que también pueden darse ciertas lesiones benignas, o se sienta alguna que otra molestia.
Las causas principales son:
- La deshidratación: debida a la alteración del ácido hialurónico y la baja producción de glándulas sebáceas. La capacidad de la piel para absorber grandes cantidades de agua para hidratar la piel y el equilibrio hidrolipídico se ven afectadas.
- Reducción de la renovación celular: la producción de queratinocitos en el estrato basal disminuye por una baja producción de células nuevas en la capa germinativa de la epidermis.
- Fotoenvejecimiento: los rayos UV generan daños en la estructura celular, a las fibras de colágeno y a las de elastina, provocando la aparición de manchas en la piel.
- Menos elasticidad en la piel debido a una alteración de las fibras elásticas de colágeno, reduciendo la síntesis de elastina y colágeno, y la actividad de los fibroplastos. La acumulación de radicales libres da como resultado la aparición de ojeras, bolsas bajo los ojos, la aparición de arrugas y flacidez.
- Falta de nutrición y oxígeno. Al envejecer los capilares sanguíneos, la microcirculación de la misma reduce su velocidad, oxigenando y nutriendo menos la piel.
- Menos firmeza en cuello y escote. Con el paso del tiempo y el cambio de metabolismo, aparecen pequeños cúmulos de grasa en el cuello y el escote, perdiendo elasticidad en ambas zonas.
¿Qué provoca la aceleración del envejecimiento de la piel?
Existen diversos motivos por los que la piel puede envejecer con más rapidez. Entre ellos, se encuentran:
- Las modificaciones hormonales
- Los agentes atmosféricos
- La genética
- La exposición al sol
- La contaminación del medioambiente
- El estrés
Por otro lado, una alimentación escasa en antioxidantes y ácidos grasos puede ser otro motivo por el que la piel no contenga todos lo necesario para mantenerse joven durante más tiempo. A su vez, el tabaco puede ser nocivo para la piel, haciendo que esta coja un tono más apagado y oscuro.
Todo ello da como resultado final una piel seca, con arrugas y algunas manchas.
Todo tiene solución
El conocimiento del proceso del envejecimiento cutáneo permite establecer algunos caminos para tratarlo. Los tres signos clave: la pérdida de elasticidad, las arrugas y las manchas se examinan con detalle para buscar soluciones que puedan eliminar o reducir dichos problemas.
Bella Aurora Antimanchas es una de las mejores soluciones para remediar estos problemas en la piel, sobre todo en tratamiento antimanchas.
No olvidar nunca que uno de los mejores remedios para mantener una piel luminosa, suave y firme es haciendo cambios en el estilo de vida, como una buena alimentación y hacer ejercicio.